Enfermedad y política

No siento las piernas ni las manos,
mi cabeza es sólo los ojos que permiten verme
sólo siento las partes que duelen, mi boca rota
mi naríz infectada con la mala alimentación
mis uñas que dan cuenta de la infancia en que se forjó mi inseguridad
mi autoestima que se acomoda bajo los pies
mis ideas que permiten entender que he fracasado
Sólo siento lo que se pierde, pero no lo que se gana
no permiten pasar a la ofensiva
no al menos en un mundo donde todos están de acuerdo en que estoy equivocado
tan equivocado, pero al menos no sólo
lo bueno para los otros equivocados es que no son tan conscientes
no resienten
la peor mezcla es ser anarquista y depresivo
la anarquía te obliga a problematizarlo todo
la depresión te obliga a hundirte en esos problemas
a mi no me sirven las pastillas porqué se lo que buscan
a mi no me sirven las autoayudas porque es patético
a mi no me sirven las religiones porque ya les entendí la jugada
a mi me sirve entenderme que estoy sólo y quizás morir
antes que mis palabras puedan ayudar a que otros se enfermen

Domingo

Comimos sushi y nos besamos
vimos tele, los picapiedras y nos besamos
manchamos las sabanas con salsa de soja,
no lavamos la loza ni recogimos los vasos de la mesa de centro
no sacamos la ropa colgada que se mojó por la lluvia
no vimos a las familias ni preparamos las clases para el trabajo
jugamos a ser desprendidos y nos queda bien
se comienza a acumular felicidad y no sé cómo lo logramos
el gato resultó ser maravilloso y es que desde dentro creo que somos maravillosos
construimos la familia que elegimos, y aunque sea un pequeño espacio, no existe la violencia
acá nos amamos por montón y podemos amar a nuestras visitas
acá creció un refugio para los ataques nucleares
acá se resiste y se hiso la revolución
acá somos todos anarquistas y los que no, se adecúan como pueden
acá no hay dios, ni amo, ni patrón, ni marido.
este departamento, espacio que flota, espacio que está separado de la tierra
micro ecosistema a la deriva en la ciudad
es una esperanza para el mundo
es mi esperanza y mi triunfo
es el amor que no sólo es infinito a mi compañera
es también a todo lo que ella ha sido
son sus pensamientos y sus odios
son sus alegrías y reivindicaciones
son su resistencia al mundo idiota.
Hoy me siento tan enamorado, de la vale, de la casa, del gato y de mi vida
mañana no trabajo y logré hacerlo a lo caballero
con la elegancia del boicot insurrecto
quiero vivir siempre en la alegría de luchar por la libertad
por mi y mis compañeros

Cuenta Felipe

Mientras trabajaban en la constru, un maestro recién ingresado le preguntó
- Compadre, acá ¿cuanto ganamos?
- Acá compañero, nosotros no ganamos. El que gana es el dueño de esto, él manda a construir, pero no construye, es suya la riqueza y todo lo que nosotros logremos hacer. Nosotros gastamos nuestras manos y espalda. Nosotros no ganamos nada. Acá, apenas nos dan una miseria para que podamos subsistir para seguir trabajando.