miércoles, 29 de mayo de 2013

La historia



Hoy estuve en el lanzamiento de un libro de historia, se citaron algunas reflexiones sobre historia, muy lindas todas. Pero faltó una trascendental: la historia la hacen los triunfadores, y era pertinente, sobretodo entendiendo que era la historia del "Compañía de María", la misma empresa catolisista que llegó en 1600 a America del Sur, medio siglo después de Colón y sus demás delincuentes en busca de oro.

Y vale considerar que la historia de shile, en los libros escolares, para todos, empieza con éste momento, como si antes no hubiera existido un lugar ni gente ni cultura.
Entonces en las mismas embarcaciones de mercenarios y piratas, venían los curitas con sus biblias santificadas por el papa, y bajo el sello de compañía de Maria, comenzaron la evangelización o muerte, el sometimiento esclavo, el saqueo de tierras, la destrucción de construcciones, la quema de bosques, la explotación de la naturaleza, y tantas cosas más que ahora no se conocen, porque  la historia la hacen los vencedores.

Y ahí estábamos nosotros, presentes en la ceremonia "histórica" porque el contrato nos obligaba a estar, así como otro contrato obligaba a la "historiadora" escribir el libro. Un libro que sin leer me imagino está lleno de belleza, cariño, educación, valores, valores y más valores, los mismos valores que obligaban a los asesinos cortar las orejas del indígena que quisiera alimentarse, el mismo valor que ha procurado mantener el gobierno de turno en esta tierra, los valores que representan las fuerzas especiales cuando allanan los predios mapuche, los mismos valores que tenían los europeos que se llevaron a familias indígenas latinoamericanas a ser exhibidos como cosas en los museos de paris, belgica y alemania en 1889. los mismos valores que los terratenientes tenían cuando pagaban por cabeza cortada de indígena, los mismos valores que el católico augusto p.u. profesaba cuando pidió la pena de muerte para el mapuche que osara ocupar la tierra en la que vivió toda su vida.

Después se cantó el himno para que todos fuéramos una sola voz, después el coctel con torta y café, vinieron las felicitaciones, las emociones, la mafia eclesiástica a microescala sonreía con sus estómagos llenos de comida, pues aunque lleven años sin trabajar, saben que en el sur hay gente que está dejando de comer, para que ellos sean alimentados, sonrisas y valores se desprendían por todas partes
Así es la historia, de los triunfadores, y no nace como deseo personal del historiador, nace como petición del mismo sujeto de estudio, de ese modo.. ¿cómo podría existir una historia oficial?  ¿cómo podría la historia no ser más que propaganda del triunfador? 


Hace 15 años Tiro de gracia cantaba esto, y ahora me hace sentido

furia por la lujuria de la injuria del estado
que ha censurado penuria pues ha
reemplazado educación por paginas de traición
en un libro manoseado de pasado censurado
en el antiguo descubrimiento
ambiguo
acompañada por una cruz, bañada por una luz 
que ilumina hipocresía y regia al mesías, 
vestía traje de culpable y hoy es honorable, 
como el profesor en el silencio esconde horror, el error de dejar matar

No hay comentarios:

Publicar un comentario